Hoy visitamos…
Maltacaballar, una pequeña cervecería artesana con su propio Taproom sita en Alpedrete en la sierra de Guadarrama a poco más de media hora de Madrid.
El proyecto esta comandado por Manuel Montero, su maestro cervecero, nuestro anfitrión y el vuestro si os animáis a visitarla.
Con una producción de aproximadamente 1500 litros al mes para abastecer el bar de la propia fábrica y a sus clientes, elaboran desde el año 2019 un portafolio con cinco cervezas fijas y algunas estacionales.
Aquí toda gira en torno al mundo equino; desde su logo hasta el nombre con el que bautizan a sus cervezas, y en general la filosofía de la propia empresa.
Hablando con Manuel nos explica que todo comenzó sobre el año 2011 cuando todavía era un pequeño aprendiz de homebrewer, con una pequeña olla de 15 litros se lanzaba a hacer sus pequeñas producciones en una época en la que todavía no existían los suministros para pequeños cerveceros de los que disfrutamos hoy en día. Así que para su primera cerveza tuvo que emplear cebada caballar (la que se da para alimentar a los caballos) levadura de panadería y lúpulo de herbolario (que se suelen utilizar para preparar infusiones para facilitar el sueño).
Con todo, aquella primera elaboración no debió ser tan mala porque esto le incentivo a seguir elaborando y practicando. Poco a poco fue mejorando sus recetas hasta que se decidieron a abrir y lanzarse al mercado. Es lo que podemos llamar un buen ejemplo de cerveza local, de cercanía, fresca y con personalidad.
Entre sus elaboraciones fijas tenemos:
- Babieca (legendario caballo del Cid) una blonde ale de 5º.
- Bucéfalo (caballo de Alejandro Magno) una tostada de 4, 5º.
- Marengo (uno de los caballos de Napoleón) una de trigo cercana a las wit belgas de 4´5º.
- Othar (caballo de Atila, el rey de los Hunos) una stout con pimienta negra de 6º .
- Incitatus (el caballo preferido de Calígula) una Ipa de 6º.
Aunque estacionalmente elaboran una sesión Ipa, una fruit ale con moras silvestres del Guadarrama recolectadas por ellos mismos o una Christmas ale con diversas especias, cuyos barriles suelen acabarse pronto.
Aquí no tratan el agua más allá de eliminar el cloro, es un agua blanda y suelen emplear maltas inglesas.
El Taproom está operativo de jueves a domingo y es buena opción para degustar buenas birras locales junto con unos perritos calientes o unos nachos. Hacen eventos y conciertos para dinamizar la zona y hay disponibles visitas a la fabrica junto con el maestro cervecero.
Tienen pagina web (http://www.maltacaballar.com/) y un club de amigos y redes sociales.
Lo dicho cervezas de proximidad, frescas y bien elaboradas si estáis en Madrid y pasáis por la sierra de Guadarrama es una parada obligatoria.
Salud y birras
Por cierto el 11 de julio cumplen un lustro y se esperan grandes y buenas sorpresas síguelos y lo te lo pierdas.