En nuestro repaso por la familia de las ipas hoy nos vamos a detener en la madre de todas ellas o mejor dicho en la heredera de las cervezas que se hacían para exportar a ultramar en el imperio británico allá por el siglo XVII.
Hoy hablaremos de la Ipa inglesa.
Las cervezas que bebemos hoy son herederas o recetas mejoradas o diferenciadas de otras que se bebían años atrás. De esta manera las Ipas americanas o las nuevas clases de ipas que utilizan lúpulos americanos nacieron de una nueva interpretación de las ipas inglesas. En este caso según parece la primera IPA americana fue elaborada por la Anchor Brewing Company en San Francisco sobre el año 1975, utilizando sólo lúpulo Cascade, bajo el nombre Liberty Ale.
A su vez esta Ipa Inglesa es una variación de las Pales Ales que se bebían en Inglaterra en el siglo XVII, en esta época también se consumían Porters y otras ales más fuertes y oscuras.
Cuando hablamos del imperio británico nos referimos al conjunto de los territorios propios y dominados (colonias y protectorados) del Reino Unido entre los siglos XVI y XX (hasta el año 1949). Se trató de uno de los imperios más extensos de su época y de la historia (unos 33.700.000 km2 de superficie), se suele hablar de una primera etapa imperial en el siglo XVIII y una segunda que data entre 1870 y el comienzo de la Primera guerra mundial en el siglo XX, conocida como el “Nuevo Imperialismo” europeo.
El hecho es que esto significaba que la metrópolis esparcía su cultura, gastronomía, tecnología y forma de gobierno por medio planeta. Los británicos desplazados a colonias querían seguir consumiendo muchos productos como si estuviesen en plena campiña inglesa.
En el caso de la India, dada su climatología, tecnología, infraestructuras y desarrollo no permitían fabricar in situ una cerveza de una calidad semejante a la que bebían en Inglaterra, y esta tenía que importarse desde allí. Esto significaba un viaje de más de cinco meses en barco, soportando balanceos, cambios de clima, que hacía que las cervezas (que de por sí son malas viajeras) no llegasen con la frescura deseada incluso algunas se estropeaban en el viaje. Las cervezas más negras como las Porter no eran tan apetecibles en un clima tan caluroso y húmedo aunque aun así se seguían consumiendo.
Según la leyenda, porque como ocurre tantas veces a lo largo de la historia esto no esta tan claro a un cervecero inglés (George Hodgson) que trabajaba en la cervecera Bow de Londres se le ocurrió variar la receta de su ligera pale ale y robustecerla con mas cantidad de lúpulo y alcohol. Estos dos ingredientes al tener características antisépticas y conservantes hicieron que la cerveza llegase en mejores condiciones (Hay que recordar que la refrigeración artificial y la pasteurización no llegarían hasta el siglo siguiente), también parece que utilizó maltas más claras que se beneficiaron del balanceo continuo del viaje en barco logrando una fermentación mas optima y haciendo que al final del viaje con estos continuos cambios de clima, la cerveza final fuese más amarga, seca, carbonatada y fuerte.
Lo cierto es que el producto gustó, las exportaciones crecieron y pronto surgieron imitadores. Aunque Hodgson nunca reivindicó su invención. La nueva cerveza con mas cuerpo fue bautizada como la Pale Ale para la India, o lo que lo es lo mismo, India Pale Ale.
Este estilo lupulizado y moderadamente fuerte tiene un sabor a lúpulo menos marcado y un sabor a malta más pronunciado que las versiones americanas. pero aun así tienen un IBU (unidades de amargor)que oscila entre los 40 y 70.
El sabor de la malta es mucho más pronunciado, ya que se utiliza malta Pale Ale de origen inglés. En algunas versiones se le agrega azúcar refinada, pero no es un ingrediente que defina al estilo, del mismo modo algunas cervecerías prefieren usar agua estilo “Burton”, con más minerales, lo que le da un carácter especial a la cerveza.
El aroma a lúpulo floral entre moderado y alto, a veces con un carácter terroso, afrutado o ligeramente herbal es mucho menos acusado que en las versiones americanas. Es también frecuente la presencia de aroma a malta caramelizada. Suelen presentarse con un color ámbar no muy potente, con tonos naranjas con una buena corona de espuma de color blanquecino.
El sabor lupulizado debería ser equivalente al aroma de la cerveza con un sabor a malta agradable que no debe predominar por encima del carácter lupulizado. La sensación final en boca es un poco seca, y el amargor puede persistir en el retrogusto, aunque no debería ser muy fuerte, deberían ser suaves y con cuerpo medio y con un nivel alcohólico entre los 5º y los 7,5º.
Como vemos un estilo clásico, con historia, y como la vida misma con un toque dulce y acaramelado y con otro amargo. Así que servíos una Ipa inglesa y brindad por lo que queráis con salud y birras.